lunes, 10 de septiembre de 2012

Biblias se venden en Teherán, a pesar de ser calificadas de “ilegales”

Aunque el gobierno islámico de Irán y sus sistemas de seguridad categorizan la Biblia como ilegal, prohibiendo su distribución y un delito su uso, se le puede comprar una Biblia a los vendedores ambulantes que andan en las calles o puede encontrar una Biblia en las tiendas de libros antiguos.
Naser-Khosro Street, es una de las calles más antiguas y conocidas de Teherán, la capital.

Esta calle asombrosa se conoce en todo el país porque allí se encuentran los distribuidores de medicamentos ilegales porque son medicamentos baratos que en las farmacias legales no de pueden comprar por lo altos precios. Ahora, una calle similar a la mencionada, usted puede comprar libros difíciles de encontrar y es ilegal en Teherán es la calle Enqelab (que significa revolución). Allí usted puede encontrar libros cuyos títulos es posible que acabamos de escuchar.
Los vendedores ambulantes de la calle llegan a la calle Enqelab a vender libros que se clasifican como ilegales por el régimen islámico de Irán, así como libros difíciles de encontrar.
El servicio de noticias Daneshjoo, informó que algunos entusiastas al mercado de libros creen que muchos libros que son prohibidos que se impriman o se distribuyan se pueden encontrar en estas librerías.
Un universitario estudiante de religiones dice: “El libro llamado” Los Versos Satánicos “, cuyo autor fue llamado “apóstata” por el ayatolá Khomeini y cuya impresión y distribución ha sido prohibida desde entonces, se venden libremente en algunas tiendas de libros antiguos”.
Lo que es sorprendente es que el estudiante dice que su profesor le ha dado a los estudiantes la dirección de estas librerías.
Los musulmanes creen que Salman Rushdie ha profanado el Corán y el Islam en su libro titulado: “Los Versos Satánicos”. El ayatolá Khomeini, el fundador de la Revolución Islámica de Irán emitió una Fatwa contra él en 14 de febrero 1989, pidiendo a todos los musulmanes a que lo mataran dondequiera que lo encontraran, porque según Khomeini, es un apóstata.
En cuanto a la facilidad de encontrar libros ilegales en Teherán, un coleccionista de libros que compra libros para su colección personal, dice: “Usted puede encontrar los libros publicados antes de la revolución islámica, sin mucho esfuerzo en las colecciones en las tiendas de libros antiguos en la calle Enqelab.
Biblias que se venden en la calle Enqelab
Según los periodistas de Mohabat News dicen que “la venta de recursos bíblicos y cristianos es aún limitada en las iglesias iraníes. Esto es especialmente cierto por la falta de Biblias en lenguaje persa o farsi, idioma que se habla en Irán, así como libros teológicos cristianos en farsi para nuevos creyentes.
Según una orden emitida por las autoridades de seguridad iraní, sólo miembros oficiales aprobados por el gobierno les permite a las iglesias que puedan ver y comprar libros para sus bibliotecas”.
Aunque la venta de Biblias está prohibida en Irán, la Biblia es un libro considerado ilegal y las librerías son advertidas por las autoridades de seguridad que están en contra de su venta, sin embargo la versión persa de la Biblia se puede comprar fácilmente en Teherán.
Hace algún tiempo, un autor iraní que ha vivido durante 20 años en los EE.UU., dijo: “A veces cuando paso por la calle Enqelab, veo que la Biblia se vende por sólo 300 tomans (aprox. 25 centavos de dólar)”, dijo en una entrevista con la agencia de noticias en idioma farsi, propiedad de la Guardia Revolucionaria.
Las ideas de este autor están en consonancia con el régimen islámico de Irán. Pero reconoció que los jóvenes iraníes se están convirtiendo al cristianismo y declaró: “Ellos (los jóvenes iraníes) solo tienen la herencia del Islam de sus padres, pero ahora están siguiendo la Biblia”.
Sin embargo, el ministro iraní de Cultura y Orientación Islámica, ha anunciado que se ocupará de la distribución de libros ilegales en las librerías. Además, el comandante de la policía iraní, Esmaeil Ahamdi Moqadam, dijo que las fuerzas policiales estrictamente se ocuparán de vendedores de libros que tratan de vender libros “ilegales”.



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